In this volume, we discuss the alphabet, definite and indefinite articles, and verbs ser and estar, among other topics.
El pasado treinta y uno de diciembre de dos mil veintiuno, me preparaba para recibir el año dos mil veintidós junto a mi esposa y a nuestro pequeño hijo. Mientras le dábamos la cena a nuestro bebé, hablábamos de cómo celebrábamos el año nuevo antes de la pandemia. Durante esta conversación, le mencioné las tradiciones colombianas que recordaba de mi infancia. Ella se rió un poco después de mi narración y me dijo que los colombianos estábamos un poco locos. Quizás ella tenga razón, pero la locura es algo subjetivo y espero que ustedes lleguen a sus propias conclusiones después de leer este artículo.
Quiero mencionar que todo lo que voy a contar usualmente ocurría en aproximadamente diez minutos y que generalmente no había un árbitro[1] que mantuviera el orden de la celebración. También vale la pena mencionar que en este artículo no incluí los preparativos necesarios para llevar a cabo todas las tradiciones de año nuevo, pero no era extraño que los preparativos tomaran más de un día.
Bueno, ahora vamos a dar un paseo por los recuerdos de mi niñez empezando con los requisitos de los atuendos[2] para recibir el año nuevo. Siempre era importante llevar una pinta[3] nueva en la noche vieja y muchas personas también optaban por llevar ropa interior nueva amarilla, blanca o roja. Algunas personas llevaban una prenda[4] íntima de cada color – ¡sí, se ponían tres! – debido a que cada color representaba algo diferente, el amarillo significaba oro/dinero, el blanco era salud y el rojo simbolizaba el amor. Según la tradición, usar la ropa interior de estos tres colores incrementaba considerablemente las posibilidades de tener dinero, buena salud y amor en el año nuevo.
Ahora vamos a hablar de lo que pasaba justo cuando el reloj marcaba las doce en punto de la noche. Según recuerdo, lo primero que tenía que hacer era felicitar a una persona del sexo opuesto e intercambiar tres monedas con esta persona. El intercambio de las tres monedas representaba nuestros deseos de salud, dinero y amor para esta persona. Después de esta transacción de deseos, se tenía que comer doce uvas porque cada uva representaba un mes del año y el comer una uva deseando lo mejor para el mes correspondiente garantizaría buena fortuna para todos los días del año. Inmediatamente después de terminar las uvas, los miembros de la celebración debían beber una copa de champaña con tres granos de arroz al fondo y la meta era tragar los granos de arroz. Por lo tanto, la copa de champaña tenía que ser bebida rápidamente para que los granos de arroz no se quedaran atorados[5] en el cristal. Los tres granos de arroz también representaban salud, dinero y amor porque era mejor reforzar lo de la ropa interior y las monedas para estar seguros. Vale la pena mencionar que los niños no bebían champaña, pero ellos tomaban jugo de manzana o uva con gas.
Una vez terminada la parte gástrica de la bienvenida del año nuevo, se proseguía a correr con una maleta vacía alrededor de la manzana para tener suerte y viajar mucho durante ese año. Normalmente las calles estaban llenas de gente corriendo con maletas vacías en todas las direcciones; algo que siempre me impactó mucho porque en las calles no sólo había gente corriendo con el equipage simbólico, también había una gran cantidad de niños y adultos jugando con juegos pirotécnicos[6] que convertían correr por la manzana en una carrera de obstáculos de luces, explosiones y borrachos.
Finalmente, al volver a casa quemábamos al año viejo, un monigote[7] que estaba hecho con ropa usada y relleno de papel, cartón[8], paja[9], aserrín[10] o cualquier otro material inflamable y artefactos pirotécnicos. Este mamarracho[11] de trapo[12], papel y pólvora[13] representaba el año que terminaba y al quemarlo se daba una clausura[14] final a cualquier experiencia negativa vivida en el año que culminaba. Normalmente el año viejo era creado con mi ropa vieja porque yo era el menor de la familia y esa ropa nadie la podía heredar y recuerdo que una vez mi perro sufrió mucho cuando prendieron al monigote y tuve que salir de dónde estaba para calmar a mi boxer que al parecer pensaba que me estaban incinerando a mí. Bueno, pero las historias de mis mascotas son para otro artículo. Al terminar todas estas actividades empezaba la fiesta bailable del año nuevo.
¿Opinan que estas tradiciones son un poco locas? O por lo contrario, les gustaron y ahora las adoptarán para recibir el dos mil veintitrés. Espero encontrármelos en una de mis clases para que me cuenten.
Feliz año nuevo.
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Glosario
[1] árbitro - referee
[2] el atuendo - attire
[3] la pinta - outfit (in Colombia)
[4] la prenda - garment
[5] atorado/a - stuck
[6] los juegos pirotécnicos - fireworks
[7] el monigote - rag doll
[8] el cartón - cardboard
[9] la paja - straw
[10] el aserrín - sawdust
[11] el mamarracho - a bad looking thing
[12] el trapo - rag
[13] la pólvora - gunpowder
[14] la clausura - closure
Nelson Navarrete is a Spanish language instructor at Berges Institute.